De nuevo el timo europeo
Los presidentes de los
gobiernos latinos se muestran una vez más tan felices como unas colegialas al
decidir (¿!?) que en la política común europea se utilicen 60.000 millones €
para fomentar la creación de empleo de menores de 25 años en el período
2014-2020. La sra. Merkel lo apoya, una de cal, porque sabe que luego llegará el
tío Weidmann con la rebaja, la de arena. Llevamos así más de tres años y aún
seguimos creyendo que Weidmann, el presidente del Banco central alemán, puede
mostrarse receptivo a cualquier medida propuesta por los países del sur europeo.
Pero el único interés de este nefasto ejecutivo, nefasto para los países
latinos tanto como para Europa entera, es imponer la prepotencia del “euro
alemán”, maniatar al Banco Central Europeo, asfixiar a los países periféricos,
garantizar los riesgos de los bancos alemanes en sus créditos interbancarios a
los bancos mediterráneos, y proclamar la austeridad como valor supremo por
encima del empleo y el crecimiento económico. Cuando en realidad sus verdaderos
y bastardos intereses son imponer su ideología liberal, su talante calvinista, el
desmantelamiento del Estado del Bienestar y el enriquecimiento de inversores
alemanes abaratando nuestros costes salariales, al tiempo que refuerzan los
riesgos en España de los bancos germanos.
Así que Merkel se resistirá. Y si la
obligan a sumarse a la propuesta latina, cuando llegue a las instancias
europeas el sr. Weidmann le dará largas, en lo que ya tiene probada
experiencia. Qué cómo me atrevo a ser tan agorero? Pues bien sencillo, porque
es lo que han venido haciendo con todas las medidas aprobadas hasta ahora, la
globalización mutualizada de la deuda europea (y consiguiente desaparición de
la prima de riesgo) y la centralización bancaria, sin que nadie proteste por
pisarles el callo. Los gobiernos europeos son los únicos del mundo que
tropiezan veinte veces en el mismo Weidmann.
Merkel lo tiene fácil. Si las presiones
de los demás gobiernos europeos la obligan a ser condescendiente y apoyar
medidas contra el paro y de crecimiento económico, ya le llegará el turno al
Bundesbank para sabotearlas aprobando las medidas, sí, pero postergando su
aplicación en el tiempo, para cuando las circunstancias lo aconsejen. Y así lo
han venido haciendo desde hace ya tres años. Aprobando en teoría y demorando lo
aprobado en la práctica. Hasta cuándo Herr Jens Weidmann seguirá usted abusando
de nuestra paciencia? Y lo que es peor, hasta cuándo, marionetas gobernantes
europeos, vamos a seguir aguantando que sus hilos los mueva el sr. Weidmann cuando,
donde y como él quiera!?
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