miércoles, 12 de diciembre de 2012

532. reflexiones y otros disparates del día (12/12/12)

1. Antología de estupideces ministeriales
Me gustaría recordar y reproducir las mayores estupideces expresadas por los ministros del gobierno. Como la de Wert sobre “las becas Erasmus que sólo sirven para que los jóvenes estudiantes viajen por ahí”, o algo por el estilo, o la de Báñez sobre el “recorte del subsidio de paro con el fin de espolear al parado para que busque trabajo” de una vez en lugar de sestear a la bartola, o la de la Secretaria de Emigración sobre “el afán de aventura de los jóvenes que emigran para buscar trabajo en el extranjero” y tantas otras parecidas o peores que no han dejado de soltar en el año que llevan de gobierno. Por no hablar del exabrupto del ministro Gallardón que impidiendo los abortos ayudará a las mujeres a ser madres. O del pretendido efecto disuasorio de las tasas, sean judiciales o sanitarias (el copago). Bastaría con repasar las entradas de este blog en todo lo que va de año. ¿Me echaréis una mano?
2. Opacidad de los viajes
No han acabado el proyecto de la Ley de Transparencia (que por cierto sólo tocará contratos administrativos y concesiones, no contemplándose que también afecte a los viajes) y ya empiezan a poner trabas a la publicidad de los gastos de viaje de los diputados. Se han atrancado discutiendo si se aplicará desde el 1 de diciembre o desde el 1 de enero próximos, pero en ningún caso el PP acepta que se incluyan los viajes de todo este año. ¿Os imagináis las barbaridades y miserias que saldrían por ahí, dado el hermetismo con el que lo rodean? Se autodelatan ellos mismos. Podéis imaginaros lo que queráis. Siempre os quedaréis cortos.
3. Alemania no está por la labor
Su ministro de Economía ya está anunciando que eso de la autoridad superior bancaria centralizada a nivel de la UE que, entre otras virtudes, unificaría los actuales euros nacionales en un solo euro europeo, va para largo. Sabéis el verdadero motivo? Que el BCE tendría jurisdicción para controlar e inspeccionar todos los bancos y entonces saldría a la luz toda la miseria de muchos bancos regionales alemanes, por cuyos activos tóxicos habría que declararlos en quiebra! Y el encargado de defenderlos, Mr.Wiedmann, del Bundesbank, cumple su trabajo aunque con ello se cargue a media Europa.

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